Museo Hergé
A fuerza de creer en los sueños, el hombre los convierte en realidad. Esta frase de George Rémy, Hergé, sirve de perfecta antesala para esta noticia, ya que por fin el pasado 2 de junio, tras dos años de retraso y con diversas polémicas a sus espaldas, abrió sus puertas el museo dedicado a este dibujante y, por supuesto, a Tintín, su más conocida creación, que en el presente 2009 cumplió 80 años. El museo, que se encuentra en la ciudad belga de Louvain-la-Neuve es obra del arquitecto francés Christian de Portzamparc, ganador del premio Pritzker en 1994, quien ha dado al edificio una forma prismática que recuerda a la H inicial del apellido del dibujante, y cuyos amplios ventanales se asemejan a viñetas.
La creación de este museo ha sido posible gracias a la constancia de Fanny Rodwell, segunda esposa de Hergé, que ha aportado los 17 millones de euros del presupuesto. En sus paredes se expondrá una ingente cantidad de material inédito cedido por la familia, como documentos personales, diversos objetos (entre ellos, su primera mesa de dibujante), películas, documentales, 80 viñetas y 800 bocetos originales del dibujante.
"El centro pretende ir más allá de Tintín, para dar a conocer la obra de Hergé en toda su amplitud, que incluye a otros muchos personajes, además de sus creaciones como diseñador gráfico o publicista", según comentó Laurent De Froberville, director del museo. Pese a ello, a mi juicio, es de esperar que el público visite el edificio con afán de conocer mejor la figura del reportero que la de su creador.
0 comentarios